Alrededor de esta parte de la localidad se entretejen las más hermosas leyendas: en la Cruz Verde y David y Saúl, sus personajes bíblicos predilectos, se han inspirado versos y canciones. Las celebraciones que aquí se desarrollan se originan desde la misma fundación de la villa, alcanzando gran notoriedad las fiestas de San Blas y San Blas Chiquito. Durante la república, la Fiesta de Reyes hizo enorgullecer a sus pobladores. El consumo del prú, los dulces de frutas, las longanizas, el casabe, las rosquitas y el matahambre son tradiciones culinarias aún presentes.
El 12 de enero de 1978 se hizo efectiva la Resolución No. 2, donde se ratificó, a la ciudad de Bayamo, la Condición de Monumento Nacional, y se reconocían como méritos principales ser la primera en: haber sido tomada por los insurrectos, constituir el gobierno en armas, componer y escuchar el Himno Nacional y ser consumida en llamas por sus pobladores antes de rendirla al enemigo.